Los voy a acusar con Peña Nieto…
Los yunistas pareciera que tiraron la toalla hace aproximadamente un mes. Pero el análisis de la legalidad de la elección para gobernador de Veracruz apenas ocurre hoy 26 de octubre.
El último suspiro azul a favor de Yunes fue la embestida mediática orquestada en contra de los magistrados del TRIFE, exhibiéndolos como comparsas del Gober Fogoso. Ellos, tal vez, ya sabían lo que iba a ocurrir en la sesión que nos recetamos en vivo desde las cuatro de la tarde de este día clave.
“Tenemos elementos que deben convencer a los magistrados para anular la elección de gobernador. Pero, de no ser así, aquí la dejamos y nos preparamos para apoyar a Peña Nieto para la grande. Ahí nos la va a pagar el Gober...” ... tal rumor yunista llegó una y otra vez a esta Tienda de Raya.
Dios nos coja confesados: los yunistas dejan las filas del PAN, para sumarse a la caballería tricolor que pretende sepultar las aspiraciones panistas de continuidad en los Pinos, y se cuelan a la caballada del que parece ser el ungido para reinar en este triste país a partir del 2012. El razonamiento es bien simple y hasta plausible: Si el Rey Azul no pudo vencer al Gober Fogoso….¡Muera el Rey y Viva el Astro Boy!
Son las siete de la noche del 26 de octubre de 2010. Llevo tres horas escuchando la justificación de la ilegalidad de las grabaciones del gober fogoso para considerarlas como pruebas relevantes que acrediten, de forma genérica, que hubo parcialidad en la elección de gobernador de Veracruz. Nos tienen apantallados los magistrados con sesudas reflexiones sobre derecho nacional y comparado que exigen que la admisión y recepción de pruebas se ajuste al marco constitucional: ninguna prueba obtenida de manera ilegal puede tener peso específico en una resolución jurídica. Hay otros que alegan y claman por la aplicación de jurisprudencia alemana que señala que debe admitirse una prueba obtenida de forma ilícita cuando no existan otros medios relevantes de prueba de los hechos controvertidos. Tres horas, nomás, se ha llevado el asunto de las grabaciones que obtuvo Miguel Ángel Yunes Linares y su equipo de campaña, y que fueron ofrecidas en el recurso de impugnación de la reciente elección, como prueba fundamental para acreditar la causa genérica de ilegalidad que devendría en una nulidad del proceso electoral.
¡Qué duro hueso de roer es la ley! Resulta que la Constitución protege toda comunicación privada….lo que no entiendo es....¿donde quedó la protección al derecho soberano de elegir a nuestros gobernantes?
Dejo en el tintero el comentario para después de lo que resuelva finalmente el TRIFE, pero me pregunto lo siguiente:
¿No hubiera sido más fácil capacitar y sensibilizar a los ciudadanos para defender su voto el día de la elección?
¿No hubiera sido menos costoso y menos técnico que los votantes tuvieran la oportunidad de ir a votar sin el riesgo de ser molestados o asaltados por los delincuentes electorales?
Como abogada, entiendo la prevalencia de la legalidad sobre cualquier acto ilícito….pero….
¿cómo probamos la ilicitud de la ilegalidad?
Hasta la próxima.
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