- El alcalde del municipio avala este tipo de proyectos de mercado alternativo
- Pretende contrarrestar la crisis económica que prevalece
- Busca impedir fuga de ingresos para productores y comercializadores de la región
Lidia López Espinal, Ver. 13/01/2011alcalorpolitico.com
Con el fin de fortalecer la economía comunitaria ante la crisis, aunque no sea reconocida por autoridades del sistema bancario mexicano, en el municipio de Espinal circula el Túmin, moneda local de las comunidades indígenas del Totonacapan.
Del proyecto Mercado Alternativo y Economía Solidaria, como presidente del comité, Juan Castro Soto, explica que con esa denominación de tipo local se pretende contrarrestar la crisis económica que hoy afecta al sistema capitalista neoliberal.
En el 2010 se reunieron integrantes de asociaciones civiles para la circulación de la moneda: Centro de Investigación Intercultural para el Desarrollo (CIIDES), Red Unidos por los Derechos Humanos (RUDH), investigadores de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI).
Sin intentar sustituir la moneda nacional, el objetivo es hacer permanecer la ley de la oferta y la demanda con los productos que se cosechan en la misma comunidad y de algunos servicios de consumo, desde sistemas computacionales hasta asesorías jurídicas.
El alcalde de Espinal, Salvador Lammoglia Macip, dijo que es necesario impulsar este tipo de proyectos de mercado alternativo, dejando a un lado la globalización y encarecimiento de productos derivado de la inflación mundial que proviene del sistema capitalista neoliberal.
La moneda Túmin comenzó circulación en septiembre del 2010. Después de cuatro meses, aún no se consolida ya que los ciudadanos no la aceptan como tal.
Actualmente, tienen 80 socios cooperativistas y a cada uno se le entregó la cantidad de 500 túmin, diferida en las tres denominaciones de 5, 10 y 20.
La moneda comunitaria persigue como fin que no exista “fuga” de ingresos para productores y comercializadores de los productos locales.
El presidente del comité, para el proyecto Túmin, Juan Castro Soto, dijo que con la denominación se logra reciclaje económico y se convierte en autosustentable.
Los negocios en los rubros de alimentos preparados, carnes, corte de pelo y belleza, frutas, verduras, internet, computación, médicos, farmacias, panaderías, tortillerías y servicios como hotel, costura, carpintería, asesoría jurídica, plomero, y otros, son participantes en la circulación del Túmin.
El papel moneda llamada «Túmin» (T) tiene las denominaciones de 5t, 10t y 20t. Cada moneda equivale a un peso mexicano. El billete es un rectángulo con medidas de cinco por ocho centímetros, en él están impresas pinturas de artistas como Diego Rivera y Rufino Tamayo.
Túmin, en lengua totonaca, significa dinero. Con número y palabras en lengua indígena el billete tiene marcado su valor. Se lee «Mercado Alternativo y Economía Solidaria». Válido para trueque entre socios activistas.
La primera emisión es de agosto 2010, cuenta con número de folio y el nombre del presidente, secretario y tesorero.
Se imprimieron dos mil billetes para los 5t, otros dos mil en 10t y para los 20t sólo un mil. El monto total que circula en el municipio con la moneda local, es de 50 mil t, equivalente a 50 mil pesos.
Será este mes cuando pondrán en marcha la circulación de un Túmin y tendrá el rostro de Emiliano Zapata. En la segunda edición se sustituirán las imágenes de los pintores por elementos que identifiquen a la zona del Totonacapan.
El CIIDES, RUDH y la UVI establecieron reglamentos, derechos y compromisos para el funcionamiento del mercado alternativo.
Las asociaciones buscan fortalecer la economía local y que la gente consuma en su comunidad, además de intercambiar productos cuando el trueque se dificulta. El Túmin ayuda a complementar el pago cuando los pesos no alcanzan.
Cada participante cuenta con un directorio donde puede consultar qué compañeros aceptan el Túmin, dónde tienen su comercio y qué venden.
Para que el proyecto funcione, lo primordial es basarse en los acuerdos y confianza entre los contribuyentes. Para su funcionamiento se establecieron reglamentos, derechos y compromisos; y para el manejo del Túmin se creó la Comisión Bancaria que lleva el control de los participantes quienes vigilan y asesoran la correcta actividad.
Dentro del propósito existen cambios que pudieran aplicarse en el reglamento en la Comisión Bancaria o bien terminar el proyecto si así lo desean o se viera conveniente.
Del proyecto Mercado Alternativo y Economía Solidaria, como presidente del comité, Juan Castro Soto, explica que con esa denominación de tipo local se pretende contrarrestar la crisis económica que hoy afecta al sistema capitalista neoliberal.
En el 2010 se reunieron integrantes de asociaciones civiles para la circulación de la moneda: Centro de Investigación Intercultural para el Desarrollo (CIIDES), Red Unidos por los Derechos Humanos (RUDH), investigadores de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI).
Sin intentar sustituir la moneda nacional, el objetivo es hacer permanecer la ley de la oferta y la demanda con los productos que se cosechan en la misma comunidad y de algunos servicios de consumo, desde sistemas computacionales hasta asesorías jurídicas.
El alcalde de Espinal, Salvador Lammoglia Macip, dijo que es necesario impulsar este tipo de proyectos de mercado alternativo, dejando a un lado la globalización y encarecimiento de productos derivado de la inflación mundial que proviene del sistema capitalista neoliberal.
La moneda Túmin comenzó circulación en septiembre del 2010. Después de cuatro meses, aún no se consolida ya que los ciudadanos no la aceptan como tal.
Actualmente, tienen 80 socios cooperativistas y a cada uno se le entregó la cantidad de 500 túmin, diferida en las tres denominaciones de 5, 10 y 20.
La moneda comunitaria persigue como fin que no exista “fuga” de ingresos para productores y comercializadores de los productos locales.
El presidente del comité, para el proyecto Túmin, Juan Castro Soto, dijo que con la denominación se logra reciclaje económico y se convierte en autosustentable.
Los negocios en los rubros de alimentos preparados, carnes, corte de pelo y belleza, frutas, verduras, internet, computación, médicos, farmacias, panaderías, tortillerías y servicios como hotel, costura, carpintería, asesoría jurídica, plomero, y otros, son participantes en la circulación del Túmin.
El papel moneda llamada «Túmin» (T) tiene las denominaciones de 5t, 10t y 20t. Cada moneda equivale a un peso mexicano. El billete es un rectángulo con medidas de cinco por ocho centímetros, en él están impresas pinturas de artistas como Diego Rivera y Rufino Tamayo.
Túmin, en lengua totonaca, significa dinero. Con número y palabras en lengua indígena el billete tiene marcado su valor. Se lee «Mercado Alternativo y Economía Solidaria». Válido para trueque entre socios activistas.
La primera emisión es de agosto 2010, cuenta con número de folio y el nombre del presidente, secretario y tesorero.
Se imprimieron dos mil billetes para los 5t, otros dos mil en 10t y para los 20t sólo un mil. El monto total que circula en el municipio con la moneda local, es de 50 mil t, equivalente a 50 mil pesos.
Será este mes cuando pondrán en marcha la circulación de un Túmin y tendrá el rostro de Emiliano Zapata. En la segunda edición se sustituirán las imágenes de los pintores por elementos que identifiquen a la zona del Totonacapan.
El CIIDES, RUDH y la UVI establecieron reglamentos, derechos y compromisos para el funcionamiento del mercado alternativo.
Las asociaciones buscan fortalecer la economía local y que la gente consuma en su comunidad, además de intercambiar productos cuando el trueque se dificulta. El Túmin ayuda a complementar el pago cuando los pesos no alcanzan.
Cada participante cuenta con un directorio donde puede consultar qué compañeros aceptan el Túmin, dónde tienen su comercio y qué venden.
Para que el proyecto funcione, lo primordial es basarse en los acuerdos y confianza entre los contribuyentes. Para su funcionamiento se establecieron reglamentos, derechos y compromisos; y para el manejo del Túmin se creó la Comisión Bancaria que lleva el control de los participantes quienes vigilan y asesoran la correcta actividad.
Dentro del propósito existen cambios que pudieran aplicarse en el reglamento en la Comisión Bancaria o bien terminar el proyecto si así lo desean o se viera conveniente.
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