Por: Imelda Torres Sandoval
Me permito compartirles en este espacio, una breve cronología del trabajo de estos primeros cinco meses de trabajo, que su amiga y servidora ha desarrollado al frente del Instituto Municipal de la Mujer Chicontepecana:
El 31 de Enero de 2011 se aprueba por sesión solemne de Cabildo del H. Ayuntamiento de Chicontepec 2011-2013, la creación del Instituto Municipal de la Mujer Chicontepecana, como una entidad descentralizada, y se aprueba también su Reglamento Interno, nombrando en el mismo acto como Directora de dicho Instituto a la Lic. Imelda Torres Sandoval
La Ley Orgánica del Municipio Libre del Estado de Veracruz ordena que toda institución que pretenda operar como entidad descentralizada, es decir, contar con personalidad jurídica y tener patrimonio propio, deberá contar con autorización del Congreso. Por ello, el 30 de Marzo de 2011, se entrega a la Legislatura del Estado de Veracruz el original del Acta de Cabildo del H. Ayuntamiento que crea el Instituto Municipal de la Mujer Chicontepecana y el Reglamento Interno de dicha dependencia, elaborado por su Directora Lic. Imelda Torres Sandoval.
El 02 de Mayo de 2011, durante el Segundo Periodo de Sesiones Ordinarias, correspondiente al Primer Año de Ejercicio Constitucional de la Sexagésima Segunda Legislatura del Honorable Congreso del Estado de Veracruz, se emitió DICTÁMEN DE LA COMISIÓN PERMANENTE DE EQUIDAD, GÉNERO Y FAMILIA, presidida por la Dip. Martha Lilia Chávez González, por el que se autoriza a crear los institutos municipales de las mujeres, como organismos descentralizados, con personalidad jurídica y patrimonio propios a los Ayuntamientos de Amatlán de Los Reyes, Coetzala, Chicontepec y Xico.
Con la autorización del Congreso, a partir del 02 de Mayo de 2001, el Instituto Municipal de la Mujer Chicontepecana podrá suscribir convenios de colaboración con instituciones públicas y organismos privados para elaborar programas y desarrollar acciones a favor de la mujer y de la igualdad de oportunidades y de trato entre hombres y mujeres, en los diversos sectores de la política del gobierno municipal; procurar los medios para sensibilizar en perspectiva de género a los funcionarios y funcionarias públicos; y promover la inclusión de la perspectiva de género en los proyectos y programas municipales. La importancia de constituirse como entidad descentralizada radica en que el Instituto tiene ahora vida propia, y no podrá ser víctima de ocurrencias politiqueras o presupuestales. Permanecerá para las futuras generaciones, y será obligación de los gobiernos municipales que vienen, apoyarlo para su gasto corriente y asegurar su funcionamiento y operación eficiente. Sin embargo, el Instituto deberá buscar recursos en otras arcas además de las municipales, lo que su personalidad autónoma se lo permite.
Por ello, hoy, el Instituto Municipal de la Mujer Chicontepecana convoca a toda organización pública o privada que se interese en apoyar su labor. Las puertas están abiertas para trabajar en prevención de la violencia de género y en programas que promuevan la capacitación para el trabajo y proyectos productivos a mujeres, porque no hay recurso mejor invertido que el que se destina a buscar la justicia social para los grupos sociales más desprotegidos. Estamos entonces, en el Balcón de las Huastecas mirando por un mejor futuro para las niñas y jóvenes chicontepecanas.
Hasta la próxima.
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